lunes, 19 de agosto de 2013

y sin embargo

y sin embargo cuando veo algo que me deja patas arriba me entran unas ganas locas de escribir, cuando veo una película, un cuadro, cuando oigo una canción, cuando algo creado por el hombre toca un punto específico en mi mente y noto una costura neuronal que hace crac, zip, zas, crunch, hay algo en esa cosa artificial que un tipo hizo en algún momento de su vida insignificante y sin sentido que me carga las pilas y me hace llorar, que me emociona, que me ofrece más información acerca de lo que soy que cualquier árbol, cualquier montaña, cualquier puesta de sol, cualquier entrada de la wikipedia. La naturaleza está bien, pero un cuadro de Pollock está mejor, la fuerza del color, la fuerza de una vida que se acaba pero dice estoy aquí y pinto esto, veo esto, siento esto, soy esto. Cuando escribo lo que escribo, quiero que el mundo tiemble, quiero que mis palabras superen de algún modo la corteza de los árboles, quiero que mi gritito desesperado brille y diga  que también estoy aquí y que vuestro dolor no es mayor que mi dolor. 

Vivamos.

No hay comentarios: